lunes, 2 de febrero de 2009

Migas de pastor

Este fin de semana he podido deleitarme en la mejor de las compañías de unas migas de pastor. Hemos seguido una receta de un gran cocinero, bien querido para muchos de nosotros, no lo nombraré ya que la fama no le gusta.

Los ingredientes:

Pan cortado en porciones pequeñas, pimientos verdes tipo italiano, ajos, panceta, magro de cerdo y chorizo. Lo ideal es freir todo por separado y presentarlas al plato igualmente por separado, para aquellos que no gusten de las mezclas o prefieran no tomar alguno de los ingredientes.

La miga la empaparemos la noche anterior con agua salada, la consistencia idónea de la miga mojada la da la experiencia, pero el mejor consejo es evitar que se forme una masa y buscar que toda la cantidad de pan esté bien húmeda.

Una vez hemos frito por separado los ingredientes, preparamos un recipiente tipo sartén profunda (Tipo caldereta) y utilizaremos el aceite sobrante de la fritura de los ingredientes, añadiremos el pimentón dulce (podemos añadir algo de pimenton picante) y las migas. Lo único que queda es trabajar, moviendo constantemente para que poco a poco se evapore el agua de la miga. El resultado final tiene que ser de una miga muy suelta.

Excelente alimento para el alma.

Opciones si necesitáis variaciones en la receta:

Miga de pan integral, reducir al máximo el chorizo, panceta y magro. Aumentar cantidad de pimiento y ajos.

Aprovecho la entrada y os cuento como se hacen en mi casa, receta de otro gran cocinero, mi padre.

La gran diferencia reside en el tipo final de miga, en mi caso no es una miga suelta (desecada) ya que se trata de utilizar un tamaño de pan mayor para que no se evapore todo el agua. Los ingredientes conviven en la elaboración de la miga, buscando que los sabores se incorporen al interior de la misma. Respecto al mojado de la miga en la noche anterior se aprovecha el momento para incorporar el pimenton (4 partes de dulce por 1 de picante). Los ingredientes son ajos, chorizo y/o panceta. Se sofrien los ingredientes excepto el pan y luego se incorporan las migas.

Nosotros las tomamos fundamentalmente para desayunar y si tienes "chocolate a la taza" mejor.

Esta receta se la quiero dedicar a todos los que luchan por perpetuar todas las buenas tradiciones que pasan de generación en generación.

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