Unas nociones sobre los huevos, fijaros en el código impreso, el primer número indica el modo de cría. 0 para ecológicas (aún no lo he verificado en la directiva), 1 para gallinas criadas al aire libre, 2 para las criadas en suelo (no tiene por que ser del campo), 3 para las ponedoras en jaulas. El código suele tener después las letras ES, de España (zona de producción).
En los últimos años ha cambiado radicalmente la alimentación de los animales de granja. Tradicionalmente vacas, pollos y gallinas, disponían de espacio suficiente para andar a sus anchas y el terreno que pisaban era la principal fuente de alimentación, es decir los prados de hierba.
La hierba tiene un equilibrio perfecto entre los ácidos grasos esenciales omega 3 y omega 6. Consecuentemente los animales que se alimentan así mantienen este equilibrio, como consecuencia su leche, su carne o sus huevos seguirán equilibrados.
Antes de seguir me gustaría describir algunas de las funciones de estos ácidos grasos esenciales.
Los Omega 3, relacionados con el desarrollo del sistema nervioso, hacen que las membranas celulares sean más flexibles y reducen la inflamación, además limitan la producción de celulosas adiposas.
Los Omega 6, facilitan el almacenamiento de las grasas y la rigidez de las células, así como la coagulación y la inflamación como respuesta a las agresiones del exterior.
Parece evidente que nuestro equilibrio fisiológico depende en buena medida de este equilibrio de ácidos grasos esenciales, por lo tanto depende también directamente de nuestra alimentación.
¿Y que es lo que ha cambiado? Pues muy sencillo, la alimentación de nuestros animales ha pasado a estar basada en el maiz, la soja y el trigo, apartándose de la hierba, consecuentemente el desequilibrio es brutal, hasta 15 veces superior en el caso de los huevos.
¿Y qué podemos hacer? En el caso de los huevos la cosa va por el comienzo de la entrada, tratar de comprar huevos de gallinas camperas. No es nada complicado encontrarlos.
No quiero entrar en el debate de los derechos de los animales y que supone el uso de jaulas para su cría y explotación.
Respecto a la leche, la única que garantiza que la vaca ha estado en condiciones de libertad y de que por tanto pasta y los pastos no han sido tratados con productos fitosanitarios son las leches ecológicas. (President y el Corte Inglés).
Con la carne de ternera creo que la cosa es algo menos problemático en nuestro país que en otros, nuestro ganado vacuno de carne está acostumbrado aún a disponer de prados (por ejemplo la ternera gallega), en cualquier caso siempre podemos recurrir a carne ecológica.
Queso y derivados,
Otra inestimable pérdida que está provocando el cambio de la alimentación de nuestros animales es el "Ácido Linoleico combinado, CLA" presente en quesos de vaca, cabra y oveja alimentadas de pastos. El CLA es de las pocas sustancias de nuestra alimentación de origen animal que pueden tener efectos anticancerígenos. (C.Ip, J.A. Scimeca y H.J.Thompson, "Conjugated linoleic acid. A powerful anticarcinogen from animal fat sources", Cancer 74 (3 Supl), 1994, págs. 1050-1054.)
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